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Mano dura a negocios

 Mano dura a negocios

El rastro se supervisa una vez al año.

La Jurisdicción Sanitaria VI Selva, realiza inspecciones a los establecimientos que expenden productos cárnicos de la cabecera municipal.
En esta temporada de calor muchos productos caen en descomposición rápidamente por no contar con las medidas de higiene necesarias, lo que conlleva infecciones gastrointestinales en la población al consumirlas, por tal motivo la Secretaría de Salud verifica y controla los negocios que venden carne de res, cerdo y pollo en esta ciudad, para que los palencanos consuman productos de calidad y frescos.
Regulo Díaz Díaz, coordinador de protección contra Riesgos Sanitarios de la Jurisdicción Sanitaria VI Selva, informó del operativo anual y permanente que realiza en la cabecera municipal, en donde está concentrado el 90 por ciento de los establecimientos que expenden productos cárnicos.
“Tenemos un padrón de establecimientos entre los que se destacan 58 carnicerías en Palenque entre res y cerdo, además de las pollerías son 20 comercios establecidos, los locatarios se supervisan dos veces al año, dependiendo de la temporada y la demanda que tengan los productos”, indicó.
La norma que deben seguir los establecimientos son: contar con el servicio de agua, un control de fauna nociva, la recolección de la basura, contar con el equipo de trabajo adecuado, las reglas de higiene bien establecidas para el personal esto por considerar que los alimentos están crudos, misma que los propietarios o los trabajadores tienen la obligación de entregar el producto lo más limpio que se pueda, de manera que no cause daño a la población al consumirlo.
Asimismo dos veces al año se les pide análisis del laboratorio o resultados que nos indiquen que el personal está libre de tifoidea, salmonela o de parásitos, en caso de encontrar a alguien con alguno de esos resultados se le manda a tratamiento, no pueden trabajar y cuando ya estén bien de salud vuelven a sus centros de trabajo.
“La carne de res y de cerdo son más riesgosos para consumirlas, porque desde el momento que se sacrifica el animal inicia el proceso de descomposición, aunado a ello si está en un ambiente contaminado su descomposición será más rápido, no es permitido que la carne esté mucho tiempo exhibida al público por el riesgo que corre, la carne debe estar en una vitrina bien guardada”, aseveró.
Regulo Díaz comentó que la carne refrigerada en condiciones normales puede durar hasta 30 días o más tiempo, lo malo es que sus propiedades se van perdiendo mientras más tiempo esté congelado, por lo tanto todos los establecimientos que vendan estos productos deben contar con un congelador para su conservación.
En el tema del rastro municipal el funcionario refirió que realizan la supervisión una vez al año porque  es un programa federal y el único rastro que existe en la región es el que está en Palenque.
“Cuenta con muchas deficiencias el rastro municipal como la falta de agua, el mal control de sus desechos, el mal control de las heces fecales en el caso de la res, queda claro que no contamos con un rastro municipal de cerdo”, apuntó.
Además todo comercio que no cumpla con las normas oficiales está expuesto a sanciones en este caso el primero de ellos es que al locatario se le hace un llamado de atención verbal, en segundo se le aplica una sanción económica y en tercero el cierre temporal o definitivo del negocio.
“Tenemos alrededor de 10 a 15 establecimientos que han sido suspendidos por malas prácticas de higiene en este año, en el rubro de carnes, en caso de alguna anomalía la ciudadanía puede dirigir su denuncia real con pruebas en la jurisdicción Sanitaria VI Selva de este municipio, ahí toman nota y nosotros la atendemos inmediatamente, el horario es de 8:00 a 15:00 horas de lunes a viernes”, manifestó.
Asimismo invitó a los dueños de los establecimientos para que cumplan con las reglas de higiene en sus locales, tomando en cuenta que sí ellos prestan un servicio a la ciudadanía y reciben un ingreso, tiene la responsabilidad de otorgar un producto de calidad para evitar algún daño a la salud.
Por su parte Jorge Arturo Landero Magneali, secretario general de la Unión de Locatarios del mercado público Guadalupe, dijo que en la cuestión cárnica el producto viene del rastro municipal donde una unidad trae la carne y las vísceras, esto totalmente separados como lo marca la norma de higiene, una vez que está en las carnicerías el proceso siguiente es cortarlas en partes para exhibirlas al público, además algunas partes que no exhibidas a la gente se guardan en el congelador, para que no se descompongan rápidamente por las altas temperaturas que se tienen en la región.
“Todos los productos que se vende en el mercado público son de la temporada y fresco, la ciudadanía lo sabe y por eso nos tiene la confianza para comprarlas”, comentó.
Todos los días se hace la limpieza en todos los locales, los empleados utilizan la ropa adecuada, equipo especial, todo para la atención correcta a la ciudadanía.

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