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Acecha el peligro

 Acecha el peligro

Podrían haber brotes de Ébola en el continente americano; llama la OMS a mantenerse alerta.

El mundo entero se encuentra en jaque. El estado de sitio por el resurgimiento del virus del Ébola durante julio, representa ya una amenaza para el continente americano, en el que geográficamente se ubica México; la insana vecindad con los Estados Unidos de Norteamérica, demuestra cuan frágil somos.

La enfermedad que extraoficialmente ha cobrado casi un millar de vidas en el continente africano, ronda en el continente, luego que un médico estadounidense que participaba como voluntario en Nigeria, tuvo que regresar a su país infectado de la mortal enfermedad.
Sierra Leona, Guinea y Nigeria, son los tres países en donde al menos, la Organización Mundial de la Salud (OMS), tiene datos de 961 defunciones; algunos han expresado que esta enfermedad difícilmente afectaría a México.

Temor general
Mientras en nuestro país, las autoridades sanitarias minimizan y casi en su agenda no figura abordar nada que tenga que ver con esa enfermedad, la OMS a través de su directora general Margaret Chan, ha dado un gancho al hígado, luego de anunciar en el continente americano, si existe un verdadero riesgo por lo que hay mantenerse alerta.

Es cierto, la expansión epidémica prevalece en el llamado continente negro, en Africa, en aquellos países que sufren de hambruna, miseria, desigualdad racial y ahora un virus que está exterminando a su población.

La actitud que asumen las autoridades sanitarias de nuestro país, echa la memoria atrás, cuando en 2008, desde el principio, no le pusieron la atención necesaria al virus AH1 N1, el cual se llegó a convertir en una pandemia, según lo que aceptaron los responsables de la salud en el sexenio pasado.

De acuerdo a la OMS, la propagación del Ébola al continente americano es inevitable, los riesgos de contagio son altos y todos deben estar alertas.

Origen de la enfermedad
La enfermedad que ha provocado la muerte de cientos de personas, no es nueva, hace 38 años, en 1976 se descubrió en Africa, y se le impuso ese nombre debido al río Ébola ubicado en Zaire.

Para la OMS esta enfermedad puede ser considerada como un arma biológica, por su naturaleza letal.

Los funcionarios de salud han determinado que la especie de Sudán es la que ha provocado el brote actual, uno de los tres tipos más letales de ébola. Según un informe de la OMS, la mortalidad del ébola en África oscila entre el 25 y el 90 por ciento.

Los síntomas
Los síntomas del ébola son similares a los de la gripe, por eso, es fácil confundir las dolencias. Los enfermos presentan fiebre alta repentina, dolor de músculos y articulaciones y dolor de garganta, sin embargo, los que padecen ébola también tienen diarrea con sangre y vómitos, erupciones, ojos rojos y hemorragias internas y externas.

Los investigadores aún no han confirmado cómo se transmite el ébola, pero creen que los humanos se infectan al manipular animales muertos o vivos que están infectados, o por estar en contacto directo con alguien que tiene el virus o ha fallecido.

El virus se puede encontrar en fluidos como la sangre, orina, diarrea o saliva, por lo que el contacto directo con fluidos infectados de animales o humanos también puede provocar el contagio. Además, también se produce la transmisión con agujas, bisturís y ropa sucia o de cama.

Tratamiento
Todavía no existe ningún tratamiento ni vacuna para curar el ébola. Lo máximo que pueden hacer los médicos es reducir el dolor de los infectados.
Aunque la semana pasada tres frascos de suero almacenado a temperaturas por debajo de los cero grados centígrados fueron enviados a Liberia para salvar a los voluntarios que estaban infectados. El medicamento ha sido desarrollado por la firma de biotecnología Mapp Biopharmaceutical Inc, aunque todavía no se ha provado en humanos. Según la farmacéutica, cuatro monos infectados de ébola sobrevivieron a la enfermedad.
¿Se extenderá el ébola?

La clave para evitar la extensión del ébola a otros continentes es la prevención. Es fundamental evitar el contacto con fluidos corporales de los infectados, para lo que es recomendable vestir equipo de protección personal.

Los expertos han asegurado que es improbable que el brote actual se extienda a otros lugares. Además, el único brote en Estados Unidos se produjo cuando se importaron monos de investigación infectados, aunque ningún humano enfermó.

Morfología
Tanto el virus Ébola como el virus de Marburgo son virus pleomórficos (de morfología variable), cuyos viriones suelen presentar formas filamentosas que pueden alcanzar grandes longitudes; sin embargo, presentan un diámetro bastante uniforme.

El genoma del virus consiste en una molécula única de ARN monocatenario lineal de polaridad negativa (19,1 kb) que tiene la información codificada para siete proteínas estructurales que forman el virión.

El virión está constituido por un nucleoide proteico con forma tubular (20-30 nm de diámetro) rodeado por una cápsida helicoidal (40-50 nm), recubierta a su vez por una membrana regularmente espiculada, su envoltura viral, estructuralmente integrada por una única glicoproteína viral.

Epidemiología
El virus se transmite por contacto directo con líquidos corporales infectados como la sangre, la saliva, el sudor, la orina o los vómitos, de animales o humanos, vivos o fallecidos. Cabe destacar que las ceremonias de inhumación que se celebran en ciertas aldeas africanas debido a la idiosincrasia parecen estar relacionadas en el contagio, ya que los miembros del cortejo fúnebre entran en contacto directo con el cadáver.
El periodo de incubación varía de 2 a 21 días, aunque lo más normal es de 5 a 12 días.

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