En la mira de Ley Vicaria 135 papás
Con la aprobación de la reforma a la Ley Estatal de Acceso a las Mujeres a Una Vida Libre de Violencia, se reconoció la “Violencia a través de interpósita Persona” o Ley Vicaria, lo que ponen en la mira a 135 padres señalados como violentadores.
De acuerdo con Claudia Magaña Lugo, representante de la asociación civil 25 Día Naranja que brinda apoyo a madres víctimas de violencia vicaria, aunque se tiene registro de al menos 135 casos con carpetas abiertas de mujeres que denunciaron este tipo de violencia, la cifra real podría ser superior a los 350 casos, ya que existen hechos en los que las mujeres por miedo o desconocimiento no denuncian.
Las sanciones por violencia interpósita contra las mujeres se rigen por la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, el Código Civil y el Código Penal Federal. Aquellos que sean encontrados culpables de este tipo de agresión podrían enfrentar hasta cinco años de prisión según dichas leyes.
En palabras de María Guadalupe Pérez López, integrante del Frente Nacional Feminista, se está trabajando en el resarcimiento de las consecuencias legales y en establecer modelos de prevención, atención y erradicación por parte de las autoridades competentes. El Estado tiene la responsabilidad de reparar el daño sufrido por los niños durante el tiempo de la laguna jurídica.
PUEDE LLEGAR AL FILICIDIO
Por su parte, la legisladora Laura Patricia Ávalos resaltó la gravedad de la violencia vicaria, catalogándola como una manifestación cruel y letal de la violencia de género. Una forma de violencia, potencialmente encaminada al filicidio que debe ser abordado de manera urgente.
El 20 de marzo pasado, la LXIV Legislatura del Congreso del Estado de Tabasco aprobó reformas y adiciones a la Ley Estatal de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, a fin de tipificar como delito la violencia vicaria que históricamente ha vulnerado a las mujeres en la entidad.
“SOLO QUIERO ABRAZAR A MI HIJO, SU PADRE ME LO ARREBATÓ”
Saraí Pérez García atraviesa hoy su día 766 sin ver a su hijo, sumida en un dolor que no cede, siendo víctima de una cruel violencia vicaria impuesta por su ex esposo. Este martirio se inserta en el tráfico de influencias, una corrupción le arrebató la custodia del menor.
El caso de Saraí no es único, sino que se suma a una lista que se alarga con más de un centenar de historias similares en la entidad, donde jueces, magistrados y funcionarios judiciales son cómplices de la violación sistemática de los derechos de las madres.
En medio de la desolación que la ha envuelto durante más de dos años, Saraí halló un destello de esperanza al conocer la aprobación de la Ley Vicaria en Tabasco. “Estoy agradecida por el esfuerzo de todas las madres que, como yo, son víctimas de violencia vicaria”, expresó, reconociendo la labor incansable de la Presidenta Claudia Magaña Lugo, y el grupo 25 Día Naranja Asociación Civil.
“Estamos ilusionadas por la aprobación de la Ley”, agregó, aludiendo al alivio compartido por tantas mujeres que enfrentan el mismo calvario.
LUCHA CONSTANTE
La violencia vicaria, un monstruo de múltiples cabezas, ha sido el verdugo constante en la vida de Saraí. Día tras día, ha luchado con uñas y dientes por recuperar a su hijo, enfrentando tormentas emocionales que amenazan su diario vivir.
La falta de medidas efectivas para proteger a las víctimas de este delito en Tabasco es un espejo de la negligencia sistémica que perpetúa el sufrimiento, afectando no solo a la madre, sino también al bienestar emocional y psicológico del niño.