Domingo de Ramos desató fervor popular
La Parroquia de Tamulté el Gran Poder ha construido un camino de fe y devoción a lo largo de 55 años a través de las representaciones del Domingo de Ramos. Este domingo, más de 300 fieles caminaron largas distancias para acompañar a ‘Jesús’ en su entrada triunfal a Jerusalén en esta edición de la Semana Santa.
Todo comenzó con una oración, en el hogar de doña Mari, una mujer de la tercera edad que ha propagado su fe a Dios y a los ritos de la Iglesia.
En esta ocasión, Mari fue testigo privilegiada de la representación del Domingo de Ramos, al abrir las puertas de su casa para dar la bienvenida a unos 80 actores locales que participaron en la tradicional puesta en escena.
REZOS Y ALABANZAS
El grupo de fieles inicio su largo trayecto entre rezos y alabanzas para encarnar a los personajes bíblicos, reviviendo la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén.
Mari, visiblemente conmovida contempló no sólo el ajetreo de los participantes mientras se preparaban para llevar a cabo la representación, y realizó el camino al recinto parroquial donde culminaría la representación.
Durante este recorrido, la comunidad se unió en la calle principal para presenciar el emocionante evento, unos trescientos fieles cumplieron con paciencia el recorrido con sus vestimentas acordes a la época y las palmas en mano, símbolo de triunfo, lo más apegado a la escena bíblica.
FAMILIAS ENTERAS
En un tramo de la calle Ignacio Comonfort, el Nazareno quién transitaba sobre su burro descendió para abrazar a un hombre en un gesto de sanación. Fuera de la escena principal, Alexis, quien interpreta a Jesús, abrazó a su abuelo, quien asiste a presenciar esta emotiva procesión.
Familias enteras se congregaron para presenciar la procesión, algunos desde la comodidad de sus hogares, mientras que otros salieron presurosos para vivir de cerca la emocionante escenificación, todos unidos por su profunda fe. Finalmente, este grupo de creyentes culminó el pasaje bíblico previo a la crucifixión de Jesús, con una celebración en el templo religioso.
LLENAN DE FE CATEDRAL
La catedral El Señor de Tabasco se envolvió de un peculiar aroma a romero, una planta comúnmente utilizada para adornar la cruz de palma con motivo del Domingo de Ramos, que recibió a unos mil 500 fieles católicos en la conmemoración de la última semana con vida de Jesús, cuando entra de manera triunfal a la ciudad de Jerusalén.
Desde las primeras horas de la mañana, familias completas acudieron a la catedral El Señor de Tabasco, para bendecir sus ramos, unidos en una sola devoción en medio del sonido de los cánticos y las oraciones resonaba en el recinto sagrado.
La fe de cientos de católicos quedó grabada en este que será el camino para la Semana Santa.
A través de las palabras en el evangelio, los pasajes del sufrimiento de Cristo se reviven en toda su crudeza. La representación de la Pasión va seguida de un momento de silencio que contiene dolores de todos los tiempos, y de toda la humanidad.
