Alerta en Minnesota: descarrila un tren con un peligroso químico inflamable
Un tren que llevaba etanol y jarabe de maíz descarriló y se incendió en Minnesota el jueves de madrugada y los residentes de la zona recibieron orden de evacuar, según las autoridades.
El tren de BNSF descarriló en la localidad de Raymond, unos 161 kilómetros al oeste de Minneapolis, en torno a la 1 de la madrugada, según un comunicado del jefe de policía del condado Kandiyohi, Eric Tollefson.
“Numerosos vagones descarrilaron” y varios se incendiaron, indicó Tollefson. Se evacuaron las viviendas en un radio de 0.8 kilómetros (media milla) en torno al lugar del siniestro, indicó el jefe de policía. Los residentes fueron trasladados a un refugio en la cercana Prinsburg.
Este accidente se suma a la lista de descarrilamientos de trenes con sustancias químicas peligrosas en los últimos meses en varias zonas de Estados Unidos.
Precaución por seguridad ferroviaria
Este grave accidente se da a solamente unos días de que un tren de Canadian Pacific se descarriló la noche del 26 de marzo en una zona rural de Dakota del Norte y derramó material peligroso.
No hubo heridos y tampoco se produjo un incendio por el descarrilamiento, que ocurrió en una zona rural a las afueras de Wyndmere, una localidad de unos cientos de habitantes ubicada a unos 97 kilómetros al suroeste de Fargo.
En aquella ocasión 31 de los 70 vagones del tren se salieron de las vías alrededor de las 23:15 horas, y algunos de los vagones derramaron asfalto líquido, informó Andy Cummings, portavoz de Canadian Pacific. Sin embargo, no hay vías fluviales cerca del sitio donde ocurrió el descarrilamiento.
La seguridad ferroviaria está sobre la mesa en Estados Unidos desde el descarrilamiento e incendio de un tren de Norfolk Southern cerca de East Palestine, Ohio. En torno a la mitad de esa localidad de unas 5 mil personas junto a la frontera con Pensilvania tuvo que ser evacuada después de que las autoridades decidieran liberar y quemar productos químicos tóxicos.
Las autoridades federales y miembros del Congreso han propuesto reformas que tendrían que aplicar las compañías ferroviarias para evitar futuros descarrilamientos
