Educación será una prioridad para mi gobierno: Rutilio

El gobernador electo de Chiapas, Rutilio Escandón Cadenas, aseguró que la educación será una prioridad en su gobierno, para terminar con la exclusión de niñas, niños y jóvenes que ven la oportunidad de acceder a las aulas no como un derecho sino como un privilegio.

“En mi administración se colocará a la educación como uno de los principales pilares, por ello priorizaremos no sólo el acceso sino también la calidad de la enseñanza”, dijo al tiempo precisar que el objetivo es construir una sociedad equitativa y justa para todas y todos.

Escandón Cadenas manifestó que garantizar la educación gratuita y de calidad en todos los niveles es una condición indispensable para el desarrollo personal y el mejoramiento de la sociedad en general, por ello, añadió, desde el inicio de su administración se trabajará para que todas las escuelas públicas que cuentan con la infraestructura adecuada.

En este sentido, destacó que se elaborarán políticas públicas educativas en las que se tome en cuenta la injusticia social que existe, ya que la pobreza, la marginación y el incumplimiento de varios derechos básicos también impiden el acceso a la educación.

Una de las principales acciones, sostuvo, será garantizar el derecho al estudio para las y los jóvenes, quienes muchas veces ven truncados sus sueños de terminar una carrera y salir adelante, es por ello que se incrementarán las becas educativas para que no abandonen las aulas por falta de espacios o recursos económicos.

“Con el apoyo del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, vamos a integrar a todas y todos los jóvenes a las actividades académicas, para dotarlos de herramientas en la búsqueda de una vida mejor, alejada de los vicios y conductas antisociales”, agregó.

Precisó que dicho esfuerzo también contempla generar las condiciones para que la juventud de Chiapas se capacite laboralmente en instituciones y empresas públicas o privadas, donde puedan obtener un apoyo económico mientras adquieren experiencia para el trabajo.

“Ya lo hemos dicho antes: becarios sí, sicarios no. Queremos para las y los jóvenes más motivos de esperanza y menos frustración, que no sientan que se les ha cancelado el futuro”, concluyó.