Vivía en la oscuridad
Después de permanecer casi por 18 años encerrada, pudo salir de su casa e irse de vacaciones.
La joven sufra terribles dolores, sensación de quemarse entera y vómito descontrolado.
Imaginar que una persona podría tener características similares a las de un personaje de película podría ser increíble, pero qué pasa cuando en la vida real sí se presenta un caso así; pues por increíble que parezca, una joven vive con una “alergia vampírica” y si sale a la luz, siente que se quema.
Se trata de Hollie Cullen, de 18 años, quien desde pequeña no puede ni dejar que la luz toque su piel, tal y como le sucede a los personajes de la película ‘Crepúsculo’.
La alergia que tiene es a la luz natural y artificial, pues de recordar que le provocan terribles dolores, sensación de quemarse entera y vómito descontrolado, es mejor ni acercarse a la ventana.
Hollie tiene una piel súper pálida y aparenta ser frágil; estas condiciones con las que vive, la han hecho que permanezca en su casa encerrada todo el tiempo, por lo que conoce muy poco el exterior.
Hace poco había declarado a ‘The Sun’: “Lo único que quería de chica era arrancar las cortinas y ver el mundo, pero no podía hacerlo porque era muy doloroso. Sientes que la luz te quema, es como ser un vampiro”.
Fue así como a los 8 años abandonó la escuela, ya que muy valiente trataba de lidiar con su padecimiento, pero salir de casa se había tornado un martirio. Hasta que ocurrió un milagro, porque pensaba que estaría para siempre encerrada en un cuarto oscura.
Tuvo que esperar 10 años así y como por arte de magia comenzó a recuperarse, ya puede salir de casa, se fue de vacaciones y apenas comienza a conocer el mundo, ya que los síntomas son menos intensos.
