Lo atacan agolpes
Le dieron cristiana sepultura en Tenosique.
Saúl Díaz Villareal, era velador de una cantina y murió mientras dormía
HILARIO PAREDES: TENOSIQUE
Lo atacan agolpes en la calle, un grupo de individuos, pero muere por trombosis cardiopulmonar fue el dictamen que emitió el medico forense sobre el velador de un tugurio localizado en la calle 51 por 16, en la colonia Pueblo Nuevo, el cual ya fue Identificado y reclamada la devolución de los restos.
“Sí es mi hijo, y se llamó Saúl Díaz Villareal”, exclamó Claudio Díaz Núñez al tener a la vista la gaveta de la cámara de refrigeración del SEMEFO municipal, donde tras la necropsia de ley se guardaron la noche de ayer, los restos de esta persona de 33 años en calidad de desconocida.
Moviendo la cabeza el progenitor del extinto, mencionó: “yo soy de Villahermosa, mi hijo hace siete años salió de mi casa en busca de un futuro mejor y solo vino al encuentro de la muerte; últimamente me invitó para que viniera al encuentro de nuevas oportunidades de trabajo a este municipio, propuesta que desde luego no acepté”, recordó Díaz Núñez.
“Mi consanguíneo fue de la capital del Estado, pero su cadáver se quedará aquí en el panteón de este municipio, donde él ya había determinado vivir su vida, de manera soltera”, explica el padre del extinto, quien se hizo cargo de toda la tramitación legal y funeraria para darle sepultura a su vástago.
No murió de los golpes
En torno a esta muerte, el peritaje médico describe que las causas que producen la muerte de Díaz Villareal, fueron por un problema cardiaco y respiratorio pulmonar que le arrebataron la vida mientras dormía, sin embargo, tenía golpes contusos en la frente y la boca. Lesiones de las que no ponen en peligro la vida ya que tardan menos de 15 días en sanar.
