Diario de un Reportero

Luis Velázquez
El periodismo. Siglo XXI
Boom digital en Veracruz
La cooperativa mediática

DOMINGO
El periodismo. Siglo XXI
El internet, Google, la página web, el blog, el portal digital, el twitter, el facebook, el mensaje, todo ha modificado el periodismo.
Hoy, por ejemplo, se ha cumplido el más antiguo sueño de un trabajador de la información: tener su periódico. Un periódico digital.
Un reportero dijo por ejemplo a un jefecito de prensa:

–Te ofrezco mis servicios. Tengo mi noticiero radiofónico (donde compra el espacio). Tengo mi noticiero televisivo (en internet). Tengo mi portal. Tres medios en un solo. Y con 15 mil visitas diarias.

Entonces, el jefecito de prensa se pone serio, a la altura, digamos, de la circunstancia. Y más cuando escucha al reportero:
–Además, tengo mi casa encuestadora. Tú nada más dime el puntaje que necesitas para tu candidato a diputado federal y se lo pongo en mi encuesta y lo publico en mi portal.

La revolución tecnológica, pues, ha acabado con la modestia y la humildad en el oficio reporteril, pues, además, todos son unos fregones, capaces de derrocar, digamos, a Vlaldimir Putin con un comentario que circula en los cinco continentes del mundo… desde su portalito en la aldea, en el rancho, en la colonia.

LUNES
La cooperativa periodística
Si el filósofo y el sociólogo, por ejemplo, dicen que el ser humano cada vez se individualiza y tiende a un ser solitario, una parte del ejercicio reporteril se colectiviza.

Por ejemplo, en algunas regiones el periodismo funciona de la siguiente manera:
Uno. Llega un funcionario público al pueblo y luego del evento ofrece rueda de prensa.

Dos. Su agente de prensa ha invitado a los diaristas. Pero, de pronto, en la mesa aparecen diaristas, corresponsales, aprendices, “orejas” y bufones.

Tres. El funcionario termina la rueda de prensa y un reportero entrega a su agente de prensa un par de listas.
Esta lista, le dice, somos los reporteros VIP. Diez en total. Y esta otra es “la rasquiña”. Unos 20, 30.
–¿Y para qué me las das?, pregunta, acaso fingiendo inocencia, el agente de prensa.

–Para el embute, maestro. Nosotros trabajamos como una cooperativa. Y con la garantía de que tu nota saldrá en la prensa nacional.
Y, por supuesto, ay del agente de prensa que a los diaristas VIP entregue, digamos, mil pesos a unos, 500 a otros, porque entre ellos mismos se cuentan las cosas del embute, pensando que “ordeñó la vaca” y, por tanto, peor irá a su jefe, el funcionario.

MARTES
La elite del pueblo
El senador llega al pueblo. Y como avispas de un bosque, de pronto se descubre rodeado de grabadoras y cámaras de video y cámaras fotográficas y bombardeado con preguntas.

Entonces, ni hablar, cortesía obliga, les invita un café. Y cuando están sentados los cuenta. Son 17. Incluidos reporteros y fotógrafos. La elite periodística del pueblo donde está, pues.

De pronto, su secretario particular se acerca a punto del infarto al senador y le dice:

–Aquí tengo la lista de todos. Son 17. Todos dicen que tienen su portal digital. Y todos son directores. Y que sus portales navegan más en las redes sociales que el portal de The Washington Post.
–¿Y?, pregunta el senador.
–Pues que todos quieren su embute; pero como directores generales de un portal.
–¿Y de cuándo hablamos? pregunta el senador.
–De 5 mil pesos por portal.
–¡Están locos!
–Pues, sí, senador, están locos, pero dicen que lo mínimo son 4 mil.
–¿4 mil? ¡Ni un quinto!
–Mañana, al ratito nos madrearán en cada uno de sus portales.
–¡Que nos madreen!
–Señor…
–¡Que nos madreen!

MIÉRCOLES
Las trampas de la fe
El precandidato priista a diputado federal está furioso con un periódico digital donde publican una encuesta en que su adversario tricolor lo acaba de rebasar en la encuesta.

Y llama al jefe de prensa y furioso lo regaña y cuestiona su trabajo como operador mediático.
–Ayer iba arriba en la encuesta. Y ahora me descarrilan. ¿Qué diablos pasó?
–Nada, señor. El otro aspirante pagó más por la encuesta y por eso usted amaneció hoy en la lona.
–Pero si le compramos un espacio. Y pagamos por adelantado.
–Pues sí, pero el otro pagó más.
–¿Y ahora qué hacemos?
–¡Lo que usted diga! Pero sólo pagando más que el otro se empatarán las cosas.
–¡A la chingada! ¡Que publiquen lo que quieran!
–Pero…
–Pero no te asustes. Habla a SEFIPLAN y envíale los inspectores de Hacienda. Habla al IMSS y que los inspectores chequen si los empleados tienen el servicio médico. Habla al Infonavit y que también procedan.
–¿De parte suya?
–¡De parte mía, claro, con güevos!

JUEVES
Boom digital
En el Plan Estatal de Desarrollo de Veracruz el dato es el siguiente: en el mes de diciembre, 2010, había de norte a sur de la tierra jarocha más de cien periódicos y revistas, más 50 periódicos digitales.

Ahora, tres años con nueve meses después, han de ser unos 75, quizá cien, portales.

Es decir, Veracruz, convertido en el boom periodístico del país y hasta de varios países de América Central (Nicaragua, Honduras, Guatemala, Salvador) que son más chicos que la entidad jarocha.

Así, diríase que se cumple la sentencia del historiador Héctor Aguilar Camín de que todos los mexicanos tienen un PRI chiquito en el corazón. Es decir, en cada jarocho un reportero la patria te dio.

Y más, si el periodismo se entiende como el arte de contar historias. Mejor dicho, chismes, rumores, díceres, que por eso mismo los políticos suelen definir a los reporteros como unos francotiradores, en tanto a los columnistas les llaman calumnistas, porque suelen venderse al mejor postor.

Ahora sólo falta que el magnate turístico Harry Grappa declare a Veracruz el récord Guiness del periodismo, con el mayor número de trabajadores de la información del país que por eso, caray, hay 24 facultades de Comunicación de norte a sur del territorio jarocho.

VIERNES
Mejor pegarse un tiro…
Ninguna horda ni tribu humana ha crecido tanto en Veracruz como el gremio reporteril.
Así, un diarista pregunta a otro en un mero ejercicio básico y autocrítico:
1) Di cuántas veces te llevaste las 8 columnas de tu medio en el último mes y con qué tipo de noticias.
2) Di cuántas veces publicaste noticias exclusivas que hayan merecido el respeto, cuando menos, de todos tus compañeros del medio donde trabajas.
3) Describe las crónicas y reportajes que hayas reporteado y escrito y publicado en tu medio en los últimos 30 días.
4) Cita el nombre del reportero a quien tú respetes por su trabajo profesional fuera de serie; pero también por su integridad.
5) Cita el nombre de cinco reporteros que te respeten por tu trabajo periodístico y tu honestidad.
6) Describe el beneficio social que como reportero has logrado con tu trabajo informativo para una comunidad, un pueblo, una colonia popular, un grupo humano.
7) Describe el impacto social que has logrado con tu trabajo periodístico.
8) Describe si con tu trabajo reporteril has abatido, por ejemplo, la corrupción y la deshonestidad política.
9) Describe si la vida cotidiana se ha enaltecido en algún pueblo a partir de tu puntual trabajo informativo.
Y, bueno, si luego de las nueve preguntas la respuesta es “no”, entonces, mejor pégate un tiro…