ACONTECER DE LA SELVA Ignacio Verástegui Alfonso
“Si votando se cambiase algo, lo prohibirían” – Ken Livingstone
Para los que nacimos en los años cincuenta y pico, aún, en este sexenio parece que estamos de regreso a los tiempos, casi bucólicos, en que los perros se amarraban con longaniza, ja ja. En 1941 se filmó, bajo la dirección de Julio Bracho, y protagonizada por Joaquín Pardavé, Arturo de Córdova y Mapy Cortés, la película ¡Ay, qué tiempos, señor Don Simón! Que retrata la nostalgia de unos tiempos en que la clase media vivía en paz y abundancia, idealizaba la época de la dictadura porfirista. En sintésis, satiriza la vida de México a principios del siglo XX.
¿A que vienen las líneas anteriores? A que la semana pasada el Presidente de la República instruyó a la Secretaría de Hacienda crear una unidad administrativa, cuyo titular se denominará “Gobernador de Palacio Nacional” que tendrá la función de resguardar y mantener en buenas condiciones (conservación, restauración y/o mantenimiento) a las instalaciones del recinto, en el que hoy en día reside y trabaja el jefe del Estado mexicano. Con esto, AMLO revive un puesto que existió a mediados del siglo XIX, cuando los presidentes vivían en Palacio Nacional. Ésta figura, de gobernador de Palacio Nacional, data de uno de los periodos de gobierno considerado una dictadura, la de Antonio López de Santa Anna (1853-1855). En ese entonces, el edificio estaba a cargo de un gobernador que residía en el mismo Palacio y, según su Reglamento del 16 de junio de 1853, “su administración debía comprender los ramos de seguridad, conservación, policía y ornato”. Del gobernador dependían “un conserje, un escribiente, dos mozos, el arquitecto de Palacio, un capellán, un relojero, dos serenos y personal de limpieza”.
Esta medida va acorde con el pensamiento conservador del actual inquilino de Palacio Nacional, basta releer un poco de la historia de este inmueble en que se dan los detalles de los personajes que allí han vivido y desfilan los nombres de Hernán Cortés, su constructor y primer dueño; los 63 virreyes que tuvo la Nueva España, el primer presidente de México, Guadalupe Victoria y los que le siguieron: Vicente Guerrero, Anastacio Bustamante, Melchor Múzquiz, Valentín Gómez Farías, Antonio López de Santa Anna, Juan Álvarez, Benito Juárez García, quien ocupó la presidencia al mismo tiempo que Félix María Zuloaga hacia 1858. Cuando llega a México Maximiliano de Habsburgo con la princesa Carlota Amalia, se instalan en el Castillo de Chapultepec y en el Palacio Nacional, como “Emperadores de México”. Al ser vencidos, Juárez regresa a Palacio Nacional a gobernar el país. El último presidente que vivió en Palacio Nacional fue Porfirio Díaz, que en 1880 se cambió al Castillo de Chapultepec designada como residencia oficial hasta marzo de 1935. En el Castillo de Chapultepec vivieron Manuel González, Porfirio Díaz, Francisco I. Madero, Venustiano Carranza, Álvaro Obregón, Plutarco Elías Calles, Emilio Portes Gil, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo Rodríguez. Lázaro Cárdenas, después de la ceremonia de toma de posesión, el 1º de diciembre de 1934, como presidente de México, declaró que no deseaba vivir en el Castillo de Chapultepec, pues le parecía muy ostentoso y deseaba que todos los mexicanos lo pudieran visitar, por lo que eligió para vivir en el rancho “La Hormiga”, que estaba en el bosque de Chapultepec y a él le gustaba estar en contacto con la naturaleza. El nombre se cambió por el de “Los Pinos”, en recuerdo al nombre de la huerta donde se enamoró de su esposa Amalia Solórzano, en Tacámbaro, Michoacán. El matrimonio Cárdenas llegó a vivir en marzo de 1935 y para adecuarla a las necesidades del presidente y su familia le hicieron una serie de reformas a la casa y las construcciones cercanas. En Los Pinos vivieron todos los presidentes después de Tata Lázaro hasta EPN.
Así que a AMLO le gustan las reminiscencias del México imperial y de las monarquías europeas, y revive una figura administrativa creada por un dictador, ¿Será un preludio? El caso es que el presidente vive y despacha donde lo hicieron personajes disímbolos como un conquistador, un heróe de la Independencia, un dictador, un monarca europeo y su consorte, hasta un reformista.
*Tabasco logra condonación de adeudos y la tarifa más baja de CFE
Hace casi dos semanas que el gobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández, daba a conocer “Firmamos hoy con la CFE un acuerdo histórico que detallo brevemente: a partir del 1 de febrero se condona el historial de adeudos de los consumidores domésticos; en automático y a más tardar en 72 horas a todos los usuarios de servicio doméstico se les beneficiará con la tarifa 1F”. Esta medida beneficiará a 607,165 usuarios, el 85 por ciento del padrón de clientes de la paraestatal.
Cabe recordar que el 14 de mayo de 2019 el gobierno tabasqueño anunció que se firmaría un convenio “Adiós a tu deuda” con la CFE que buscaba regularizar los adeudos que presentan los usuarios de tarifa doméstica de energía eléctrica e iniciar la aplicación de la tarifa que corresponda, de acuerdo con los estudios de temperatura extrema que presentaría la Comisión Nacional del Agua. A los usuarios que accedieran al convenio, les sería condonada la deuda que tuvieran con CFE hasta la fecha de inicio del programa y se les aplicaría la nueva tarifa 1F. El convenio también contemplaba que el gobierno del estado de Tabasco asumiría una parte de los adeudos de las diversas dependencias estatales y compensaría a la CFE con un monto equivalente a los adeudos de los usuarios que, al finalizar el programa “Adiós a tu deuda”, no se hubieran incorporado. El programa tenía una fecha límite de seis meses, sin embargo, ante la falta de participación ciudadana, se extendió hasta mayo de 2020 y nuevamente se aplazó hasta septiembre del mismo año. Se calculaba que cancelar el mencionado adeudo sería de alrededor de 11 mil millones de pesos desde 1995, adeudo propiciado en aquel entonces por la llamada “resistencia civil”, creada por el actual presidente de la República y que consistió en no pagar el servicio de energía eléctrica a CFE.
La mayoría de los mexicanos, cumplen porque cumplen en los pagos de luz porque si no la Comisión corta el servicio, algo que no pudo hacer con los tabasqueños. Como Chiapanecos creo que no pedimos borrón y cuenta nueva, si no que nos den la tarifa F, que es la tarifa más baja, cuando menos en los municipios que cumplan con el requisito de tener la temperatura media mínima en verano de 33 grados centígrados. A ver si don Ruti le entra al convenio como el que firmó su cuñado.
*Nada nuevo bajo el Sol
Pasando a temas, de los que esperan ansiosos leer en estas temporadas de calenturientos por la polaca, no hay mucho que agregar, no hay nada nuevo bajo el Sol. Muchos anotados de los cuales algunos serán los ganadores de las candidaturas a los cargos de elección y solo uno de ellos, en cada nivel, será el ganador definitivo, aunque el pueblo, como siempre, sea el perdedor.
Este Acontecer felicita a Delfino López Hidalgo que con gran tino creó El Cubo 21, un medio de comunicación, cuyo programa Gato por Liebre, conduce Delfino y transmite en Facebook, tiene una buena aceptación en la región palencana y anexas por su profesionalismo y por los invitados que semanalmente entrevista. La transmisión del pasado viernes es una muestra de ello, allí Óscar Alfaro Zebadúa sacó sus dotes, en esta su primer andanza política. Alfaro, como todo buen médico, diseccionó la realidad de Palenque acompañándola de un buen diagnóstico y una buena receta. El doctor sacó su faceta política, es uno de los pocos que merece estar en la boleta de este 2021.
