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¿El güerito Velasco congelado?

Aunque es muy bien sabido que el presidente de México es oriundo del poblado Tepetitán, en el municipio de Macuspana, Tabasco, es cierto que su segunda residencia es Palenque, Chiapas, en donde desde hace años es dueño de la finca “La Chingada”.
Después de que AMLO gana la presidencia del país, Chiapas al igual que Tabasco saltaron a los primeros planos, sobre todo con el despertar económico del Sur-Sureste, que entre otras cosas trae la construcción del Tren Maya y la refinería en el Puerto de Dos Bocas, en Paraíso.
Sin embargo, el fin de semana pasado, Chiapas saltó de nuevo a la palestra de una manera negativa; en primer lugar, por la renuncia inesperada de la titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Josefa González Blanco, quien, por retrasar el vuelo de una aerolínea, prácticamente fue cesado del puesto.
El otro negrito en el arroz (aunque es güerito, relavado), y que hizo que las redes sociales se incendiaran, sobre todo en Chiapas, desde que se pronunció su nombre, fue el mitómano y represor Manuel Velasco, ex gobernador de esta entidad, quien dicen los conocedores está vetado o congelado-usted elija el calificativo que mejor le parezca- por nada más y nada menos que por el mandamás de país -si señor, leyó usted muy bien-.
Vayamos por parte. Vamos a desmenuzar un poco las cosas para que se comprenda a detalle de lo que se trata.
Según lo que se escucha en los corrillos políticos, lo del avión fue un pretexto o bola de humo para quitarse del camino a Josefa González-Blanco, extitular de la Semarnat, quien nunca se sintió a gusto en el equipo de la Cuarta Transformación.
Porque no era tomada en cuenta, porque no contaba con el presupuesto suficiente para la Semarnat, etc., pero algo que hay que recocerle a González Blanco, quien dijo que la refinería que se va a construir en dos bocas no contaba con los estudios de impacto ambiental, pero que aun así podían iniciar los trabajos.
Ahora bien, vamos por el asunto que nos atañe y por el cual se titula la entrega de esta ocasión; ¿El güerito Velasco congelado?
Recordará como se placeaba Manuel Velasco en los primeros días de gobierno del oriundo de Tepetitán, prácticamente busca salir en todas las fotografías, siempre con su sonrisa dibujada y dando a entender que se codeaba de tú a tú con el que gobierna en Palacio Nacional.
Pero, así como fue su reaparición, de la noche a la mañana despareció del medio político, al grado que ni al Senado de la Republica a podido regresar, todo esto tras promocionarse como el próximo Secretario de Gobernación. “A qué le tiras cuándo sueñas mexicano”, decía una de las estrofas de la canción de Chava Flores.
Y ahora de nueva cuenta, tras el despido de Josefa González-Blanco, se autofinanció una campaña para levantar el dedo y decir, que, por ser ecologista del Verde, se merecía la Semarnat, que a fin de cuenta cayó en las manos de Víctor Manuel Toledo Por lo que el linchamiento en redes sociales y mediático no se hizo esperar, saliendo a relucir que sigue vetado desde Palacio Nacional
¿Por qué cayó de la gracia de AMLO? Pues resulta que se lo ocurrió mandar un regalo con mucho veneno. En octubre pasado al Güerito se le ocurrió pagar una portada de la revista HOLA con el titular principal: “La boda de Cesar Yáñez y Dulce Silva”.
En la portada, los novios; en la parte superior izquierda, la fotografía de López Obrador acompañado de su esposa; “Testigos de honor”.
La idea del “Güerito Velasco” con la publicación era tumbar a Yáñez de la posición tan cercana al presidente, para que así poder colocar a uno de los suyos. Mala estrategia, le salió el tiro por la culata; afectó a AMLO y a uno muy cercano a su círculo político.
Hasta la fecha, al Güerito Velasco, quien siendo Gobernador de Chiapas humilló a un presidente municipal a que le boleara los zapatos, después de obligarlo a subir al avión, no se le ha perdonado ese desliz y tampoco se le ha dado señales de que regrese por su escaño al Senado.
Se cumplió el adagio: “Con la vara que mides serás medido”. Nos vemos en nuestra próxima entrega…

Redaccion Diario de Palenque

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