¿Por qué muchas veces nos ponemos tristes?
Somos un todo, tu cuerpo y tu mente no son entidades separadas. Tu fisiología afectará a tu mente y tus procesos psicológicos afectarán a tu cuerpo.
La teoría de James-Lange sobre las emociones, propone que la reacción fisiológica ante un estímulo es el que provocaba la emoción: No lloro porque tengo pena, sino que tengo pena porque lloro.
La teoría establece que, como respuesta a las experiencias y estímulos, el sistema nervioso autónomo crea respuestas fisiológicas (tensión muscular, lagrimeo, aceleración cardio-respiratoria…) a partir de las cuales se crean las emociones.
Cuando sientas una emoción (ira, tristeza, frustración..),que te hace sentir impotencia y malestar: respira hondo, concéntrate en tu respiración. Estas emociones necesitan un ritmo particular de respiración. Si conscientemente producimos un ritmo respiratorio de un estado de tranquilidad, será imposible que nos dejemos arrastrar por ellas.
Además cuando pones la atención en cómo el aire entra y abandona tu cuerpo, tu mente se desplaza a tu respiración y las emociones negativas se diluyen.
Esta es una estrategia sencilla y fácil de aplicar para controlar nuestros estados internos, pero hay muchas más.
A mi me funciona.
