Yihadistas decapitan y crucifican
En una escalada más de la brutalidad contra civiles por el Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), la ONU denunció hoy que milicianos de este grupo decapitan y crucifican a miembros de la tribu árabe Al-Sheitaat, en Siria.
En una sesión en el Consejo de Seguridad, la subsecretaria de la Organización e las Naciones Unidas (ONU) para la coordinación de asuntos humanitarios, Kyung-wha Kang, indicó que mujeres de esa tribu, asentada en la comunidad de Deir-Ez-Zor, fueron vendidas por el EIIL en los mercados de Irak.
“Fuentes de la comunidad reportan que hasta 700 miembros de la tribu árabe Al-Sheitaat, a quienes el EILL acusa de apostasía, han sido muertos o secuestrados en las pasadas dos semanas, algunos decapitados o crucificados”, sostuvo Kang.
La funcionaria de la ONU destacó que el avance del EIIL en Siria ha llevado los niveles de violencia contra los civiles que no tienen protección “a nuevos niveles”, y que el grupo comete “horripilantes atrocidades” contra aquellos que se oponen a su gobierno.
“En los últimos seis meses, la penosa situación del pueblo de Siria no se ha reducido, sino que se ha profundizado. La violencia y el conflicto continúa sin disminución, con más muertes de mujeres, niños y hombres”, resaltó Kang.
Consideró que el tejido económico y social en Siria ha sido destrozado en jirones, y que el cálculo oficial de la ONU de 191 mil muertos desde que comenzó la violencia en ese país, en marzo de 2011, está probablemente muy por debajo de la cifra real de víctimas fatales.
El análisis ofrecido por Kang se da un día después que un informe de la Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre Siria, presentado en Ginebra, asentó que la brutalidad de las acciones del EIIL son una amenaza para la estabilidad de Medio Oriente y la seguridad internacional.
La Comisión concluyó que el grupo cometió crímenes de guerra y contra la humanidad en las provincias de Aleppo y Ar-Raqqah, incluidos actos de tortura, asesinatos, desapariciones, desplazamientos forzosos y reclutamiento de menores para obligarlos a combatir.