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El fantasma insepulto de Gustavo Díaz Ordaz

En una decisión histórica, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad ayer el decreto para que se inscriba con letras de oro en el Muro de Honor del salón de sesiones de San Lázaro la frase “Al Movimiento Estudiantil de 1968”. En los hechos, los diputados de la incipiente 64 Legislatura han colocado en el cadalso de la historia –y no se descarta que también vaya a ser el principio del enjuiciamiento del todavía vivo Luis Echeverría Álvarez- al PRI y al régimen que entonces lideraban Gustavo Díaz Ordaz desde la presidencia de la República y el mismo Echeverría como secretario de Gobernación y firme aspirante a candidato presidencial en la elección de 1970.
De los comentarios –que no debate- que precedieron a la votación del decreto, surgió la propuesta de crear una Comisión de la Verdad sobre los hechos del 2 de octubre de 1968, en los que el Ejército y policías encubiertos dispararon a mansalva a estudiantes –la mayoría, de la UNAM y del Politécnico- que se manifestaban contra el régimen, matando a cientos de muchachos y muchachas que –con el paso de los años- se fue sabiendo que muchos de ellos terminaron incinerados en los hornos crematorios del Campo Militar Número Uno.
Ni un pujido del menguadísimo PRI. Todo lo que se dijo lo apechugó e incluso sus 45 diputados terminaron votando al lado del resto, para alcanzar la unanimidad.
Pablo Gómez Álvarez, diputado federal de Morena y uno de los dirigentes del Movimiento del 68, recordaba ayer desde su curul que el próximo 2 de octubre –en el cumplimiento de los 50 años de aquella desventurada matanza estudiantil-, estarán en el Zócalo de la ciudad de México convocados a participar “todo el pueblo de México”, adonde se izará la bandera a media asta. Allí estarán, dijo el legislador, todos los senadores y todos los diputados federales de la 64 legislatura. Y de ahí se trasladarán a San Lázaro para la celebración de una Sesión de Congreso General, para una Sesión Solemne y para la develación de las letras de oro “a la memoria y en conmemoración de los 50 años de aquella histórica lucha por la democracia en México”.
Sergio Mayer Bretón, diputado de Morena, fue el primero que pidió la palabra: “Esta soberanía ha escuchado el clamor popular de justicia”.
Le siguió el petista Gerardo Fernández Noroña: “Sin (ánimo de) polemizar, me parece que no es un acto de justicia, siguen impunes esos crímenes de Estado. Está vivo Luis Echeverría todavía, gozando de libertad y de impunidad, y me parece que dejar pasar esta observación sería incorrecto”.
Aleida Alavez, Ruiz, también de Morena: “Ha sido una batalla de muchos años inscribir este movimiento paradigmático en el país en el muro de esta Cámara. Hoy se logró y creo que es algo que no solamente deberemos dejar en una insignia en esta Cámara, sino en una lucha permanente por lograr esa verdad histórica de los hechos del 68”.
El PAN, en voz de Annia Sarahí Gómez Cárdenas: “En Acción Nacional también estamos a favor de esta acción que toma esta Cámara, y secundar un poco lo que dice el diputado Noroña respecto a que hay crímenes que siguen impunes”.
Presidía Porfirio Muñoz Ledo.
Mauricio Alonso Toledo Gutiérrez, del PRD: “Coincido en que no podemos recordar al movimiento del 68 tan solo con unas letras si no hay justicia, si se pasean por las calles los que torturaron y mataron y desaparecieron a estudiantes en 1968”.
El diputado de Morena Hirepan Maya Martínez: “No basta con unas letras de oro cuando seguimos teniendo avenidas que sostienen el nombre de los represores de este movimiento social y estudiantil, seguimos teniendo calles, colonias, camellones y presente el nombre de los represores”.
Itzcoatl Tonatiuh Bravo Padilla, del PRD: “La mejor manera de rendir un tributo, además de poner las letras de oro y tener nuestra sesión solemne, es que esta legislatura pase a la historia al conformar una comisión de la verdad”.
Alfredo Porras Domínguez, del PT: “Es un homenaje histórico”.
Habló Manuel López Castillo, de Morena: “Propongo que esta soberanía declarara como criminales a Luis Echeverría y Gustavo Díaz Ordaz, para vergüenza de esas familias que enlutaron en 1968 a tantas familias de mexicanos”
Y el apostille: “… Colonia Luis Echeverría Álvarez, calle Luis Echeverría Álvarez, calle Gustavo Díaz Ordaz. Hay que acabar con esos letreros en las calles en esas colonias. Ya no es posible soportar tanta impunidad. Pidamos que se borren de las calles los nombres de quienes fueron unos criminales, que mataron y todavía decían tiendo la mano, tiendo la mano, pero atrás tenía el Ejército. Criminales”.
Ninguno del PRI quiso hablar. La mayoría, de Morena, como Sandra González Castañeda: “Invitemos a esa Sesión Solemne a quienes integraron el Comité del 68”.
Del PES, Miguel Acundo González: “Qué bueno que se van a escribir en letras de oro ese reconocimiento a los estudiantes, pero este evento de hoy debe servir también para terminar con la agresión que siguen sufriendo los estudiantes, como sucedió en días pasados”.
Un dato inédito lo dio Margarita García, del PT: “Y quiero pedirles, hay una vocacional en las Tres Culturas –había, perdón– donde hicieron una clínica del IMSS. En una ampliación de la clínica aparecieron cadáveres de estudiantes desaparecidos. La clínica fue demolida recientemente, y Fernanda Campa, sobreviviente de la matanza del 2 de octubre retomó la denuncia para dar seguimiento”.
Al final votaron todos, aprobándolo y turnándolo para su publicación en el Diario Oficial de la Federación.

Redaccion Diario de Palenque

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