Niegan atención a manifestante
A bordo de un taxi fue trasladada a la Cruz Roja.
Pese a presentar convulsiones por deshidratación una de las dos mujeres que se encuentran en huelga de hambre, suturada de los labios frente al Congreso del Estado en demanda de justicia, ni el 066 ni la Cruz Roja ni el Hospital Regional quisieron prestarle la atención médica necesaria, sino después que los medios de comunicación empezaron a difundir los hechos a través de las redes sociales.
Luz Idalia Sánchez Díaz, huelguista suturada de los labios a cuatro días de haberse plantado frente a Congreso del Estado en demanda de la liberación del dirigente social Florentino Gómez, convulsionó cerca de las 14:30 horas y pese a que desde la noche anterior que registró los primeros signos de desgaste, se solicitó el apoyo a través del número de emergencia 066, no fue atendida.
Por la mañana se insistió en el 066, tampoco quisieron atender el llamado de auxilio por parte de las autoridades a cargo; pasado de las 13:00 horas, Luz Idalia se puso más grave, fue que se solicitó el apoyo de la Cruz Roja, la cual nunca llegó a las afueras del Congreso del Estado, donde junto con cuatro compañeros más, se encuentra en huelga.
Fue un médico particular que en apoyo manifestó que se encontraba deshidratada y necesitaba atención inmediata antes que sufriera un infarto, por ello, cerca de las 15:00 horas, Luz Idalia fue llevada en un taxi hasta las instalaciones de la Cruz Roja donde no quisieron atenderla.
La familia decidió llevarla a urgencias del hospital regional, en la que también se negaron atenderla, por lo que aun inconsciente fue regresada ante la sede del Congreso, donde fue nuevamente acostada en la banqueta, apoyada con unos cobertores que le sirven para resguardarse del frío.
Ante tal impotencia de verse ignoradas por las autoridades estatales, sus hijas lloraban pidiendo ayuda, responsabilizando al gobierno del Estado de lo que pudiera pasarle a su mamá, porque lo único que piden es la libertad de su abuelito Florentino Gómez.
Como a las 15:20 horas arribó al lugar el director de quejas de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, acompañado de dos asistentes y de dos mujeres, una de las dos -que dijo ser doctora- solo se dedicó a preguntar qué le había pasado a Luz Idalia y a tomar datos en su libreta, posteriormente se retiró del lugar.
Luego de que la afectada fuera regresada a la banqueta del Congreso, el director de quejas de la CEDH dijo a los familiares que “por instrucciones del secretario de Salud, la esperaban en el Hospital Regional para atenderla”, lo cual confirma que en Chiapas, la salud se atiende por instrucción y no por humanidad.
