Gobierno de Trump advierte fin de la era del acercamiento a Irán en la era Obama
El gobierno estadounidense de Donald Trump se está endureciendo contra Irán, pero todavía no puede decir cómo respaldará su retórica.
El asesor de la Agencia Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA, por sus siglas en inglés), Michael Flynn, hizo una sorpresiva aparición este miércoles, por primera vez ante las cámaras, utilizando la autoridad de la sala de reuniones de la Casa Blanca para enviar un fuerte mensaje a los líderes de la República Islámica y del Medio Oriente en general.
Desde hoy, estamos oficialmente poniendo a Irán sobre aviso”, dijo Flynn, en un comunicado que condena un reciente lanzamiento de misiles balísticos iraníes y ataques contra embarcaciones saudíes y emiratíes realizados por rebeldes de Houthi asentados en Yemen, que son respaldados por Irán.
Flynn también habló de amenazas para el transporte marítimo de Estados Unidos y sus aliados en el Mar Rojo, en comentarios que dejaron pocas dudas de que una era de diálogo entre el gobierno de Barack Obama e Irán, que descongeló más de 30 años de antagonismo y guerra de poderes, ha llegado a su fin.
Flynn pretendía dejar en claro que el nuevo gobierno de la Casa Blanca no tolerará lo que considera la actividad desestabilizadora de Irán en todo el Medio Oriente, tras las afirmaciones republicanas de que la última Casa Blanca hizo justamente eso para proteger el acuerdo nuclear que presumiría como legado.
El gobierno de Obama no respondió adecuadamente a las malignas acciones de Teherán, incluyendo la transferencia de armas, el apoyo al terrorismo y otras violaciones de las normas internacionales”, dijo Flynn. “El gobierno de Trump condena estas acciones por parte de Irán que socavan la seguridad, la prosperidad y la estabilidad en todo el Medio Oriente y ponen en riesgo la vida de los estadounidenses”.
Tony Blinken, exsubsecretario de Estado del gobierno de Obama, dijo que las pruebas de misiles iraníes eran un asunto serio y que existía un mecanismo en la ONU para abordar cualquier infracción.
Blinken, quien ahora es colaborador de CNN, añadió: “No estoy seguro de qué significa poner a Irán sobre aviso”.
Flynn argumentó que el disparo de prueba del misil el domingo fue una violación de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU. Irán negó que el lanzamiento violara la resolución, que impide el ensayo de misiles con capacidad nuclear.
Funcionarios de la Casa Blanca fueron cautos al decir que el nuevo enfoque estadounidense sobre Irán se mantenía separado del acuerdo internacional para ponerle un límite al programa nuclear iraní.
Pero la declaración es una señal clara de que la nueva Casa Blanca tiene la intención de cambiar radicalmente el rumbo de los años de Obama y está dispuesta a ser más proactiva para enfrentar la proyección de poder de Irán que cree que amenaza a sus aliados en Medio Oriente.
Los acontecimientos del día fueron también una muestra de los obstáculos de un nuevo gobierno que promulga su determinación declarada de atacar con una postura más fuerte y más dura en la escena mundial, antes de que haya formulado sus opciones de política y pueda decir qué pasos tomará para hacer cumplir sus advertencias.
Varias horas después de que Flynn hablara, tres funcionarios del gobierno, que hablaron bajo condición de anonimato para discutir las políticas de la Casa Blanca, realizaron una sesión informativa para los reporteros, pero ofrecieron poco que esclareciera la advertencia de Flynn.
Hay un gran número de opciones disponibles para el gobierno, vamos a tomar medidas apropiadas y no daré más información hoy en relación con la pregunta”, dijo uno de los altos funcionarios.
Presionado por los periodistas sobre si consideraba acciones militares, económicas o de otro tipo, el funcionario se negó a contestar.
Estamos considerando una amplia gama de opciones, estamos en un proceso deliberativo”, dijo el funcionario. “Lo importante aquí es que estamos comunicando que el comportamiento iraní debe ser reconsiderado por Teherán, que consideramos que estas acciones son inherentemente desestabilizadoras y una amenaza para nuestros amigos y aliados”.
El funcionario dijo que el nuevo gobierno estaba considerando este comportamiento en una “perspectiva distinta” que el gobierno anterior, mientras que un segundo oficial advirtió que el equipo de Trump no sería “tímido” al responder a Irán en temas de terrorismo patrocinado por el estado, por ejemplo.
Pero después de la advertencia de Flynn y la promesa de Trump en su campaña de que su estilo de liderazgo duro obtendrá un nuevo respeto por parte de los enemigos de Estados Unidos, la falta de detalles podría provocar que Teherán tenga la impresión de que el gobierno aún no está preparado para responder a ninguna escala.