Una vida soldando

Carmen Argáez Luna, de oficio herrero, lleva aproximadamente 40 años en su labor; platicó para Diario de Palenque que desde muy pequeño dejó de estudiar para dedicarse a este oficio, con el que ha logrado salir adelante.
Argáez Luna manifestó que parte de su familia se ha dedicado a este oficio, él, desde joven empezó a trabajar con su papá al cual ayudaba en los trabajos que realizaba, y al ver que en este oficio ganaba bien dejó de estudiar.
Ahora cuenta con su propio taller, en el cual realiza todo tipo de trabajos, comentó que gracias a la enseñanza de su padre, ahora se dedica a este oficio en el cual tiene para poder sostener a su familia.
“En ocasiones llegan personas a mi negocio con la finalidad de aprender un oficio, son pocos los que le toman cariño”.
También manifestó que tiene muchos clientes porque es una persona que no cobra caro los trabajos ya que otros herreros manejan precios muy elevados.
Don Carmen, como le dicen sus clientes, es padre de seis hijos, tiene la esperanza que sus hijos trabajen el oficio de la herrería porque es un trabajo que nunca se va a acabar, sobre todo en esta ciudad que son contados los buenos herreros.