Alivia los calambres
Estas contracciones breves, intensas y dolorosas ocurren sobre todo en los músculos de las pantorrillas y los pies. Aunque no son graves, afectan la calidad de vida y las horas de sueño porque suceden principalmente por las noches. Se estima que inician a partir del segundo trimestre y aumentan en la recta final de la gestación.
No se sabe con certeza qué los genera pero se atribuyen a las alteraciones hormonales y físicas por las que tu cuerpo atraviesa en esta etapa por ejemplo:
– Circulación sanguínea que se vuelve más lenta
– Presión que el útero ejerce sobre los nervios y vasos que van a las piernas
– Opresión de los músculos por el aumento de peso
– Acumulación de líquidos
– Lo que comes cuenta
– Se considera que la falta de líquidos y la deficiencia de ciertas vitaminas y minerales como las del grupo B, calcio, potasio y sobre todo magnesio son factores que benefician su aparición.
Por eso, es importante que cuides tu alimentación y platiques con tu médico sobre un cambio en tus hábitos alimenticios o la conveniencia de tomar un complemento nutricional.
Una alternativa
Estudios han demostrado que el magnesio reduce su frecuencia e intensidad, incluso más que el calcio y el potasio, ya que contribuye a la relajación muscular.
Siete tips para prevenirlos
– Toma un baño con agua caliente, de preferencia antes de acostarte para distender tu cuerpo
– Intenta dormir sobre tu lado izquierdo para favorecer el flujo de sangre hacia tus piernas
– Haz ejercicio todos los días, por ejemplo caminar, nadar, yoga o gimnasia acuática. Consulta a tu especialista sobre la actividad idónea para ti
– Evita permanecer en la misma posición. Trata de no estar parada o sentada durante mucho tiempo, no cruces las piernas y toma varios descansos al día
– Ponte zapatos cómodos. Puedes usar tacones que no sean muy altos, pero tampoco planos; con eso también evitarás el dolor de espalda
– Date un masaje para reactivar la circulación. Puedes utilizar aceites de manzanilla o lavanda si quieres obtener mejores resultados
– Modifica tu dieta. Incluye alimentos ricos en:
– Magnesio: Verduras de hoja verde oscura, plátano, aguacate, almendra, frijol y arroz integral
– Calcio: productos lácteos, brócoli, salmón, sardina y nuez
– Potasio: espinaca, uva, mora, zanahoria, papa, naranja y toronja
Ejercicios
Sentada
Estira la pierna y flexiona lentamente el tobillo y los dedos del pie en dirección a tu nariz. Mueve el piel en forma circular, también es útil.
Parada
Colócate frente a una pared a una distancia aproximada de 60 centímetros, apoya tus manos sobre ella y siente cómo se estiran tus pantorrillas. Mantén la posición por 10 segundos, descansa y repite dos o tres veces.