El santuario cura hemorroides
Los templos o santuarios son algo común en Japón, lo que no lo es tanto es a lo que están dedicados. Tal es el caso del Santuario Kunigami, en la Prefectura de Tochigi.
La gente acude a este lugar en busca de una cura para las hemorroides o para prevenir tal enfermedad. La tradición era lavar su trasero en un río cercano al templo y comer las ofrendas de huevo, y según dicen, eso les devolvía la salud.
Hoy, sin embargo, la gente se limita a recitar un encantamiento mientras dirigen su trasero a una piedra lisa lavada, con forma de huevo, que está en el centro del altar.
Por muchos años se siguió la tradición en el festival ‘Kisai’, aunque para 1988, decayó y así siguió hasta hace un par de años, porque el problema de las hemorroides tuvo un aumento repentino.
Y si no los cura al menos la divertida experiencia les hace olvidar un rato su crisis, comenta Oditty Central.
