Agreden a alcalde
Tras tomar la alcaldía de Tumbalá, pobladores del ejido José María Morelos fueron sometidos con gas pimienta después de agredir al alcalde Urbano Álvaro Arcos; se llevaron al síndico y al segundo regidor. Exigen resolver promesas incumplidas.
Desde las 8:00 de la mañana de ayer, unos 200 pobladores del ejido José María Morelos tomaron el palacio municipal de Tumbalá, exigiendo responder a las promesas incumplidas por el alcalde Urbano Álvaro Arcos; alrededor de la 1:50 de la tarde éste les contestó mandándoles a la Policía Municipal, quienes rociaron gas pimienta a los inconformes, los cuales exigen la renuncia del edil y de su asesor jurídico.
Horas después, tras esta acción Baltasar Jiménez Torres, síndico de Tumbalá y Manuel Álvaro Arcos, segundo regidor del mismo municipio, fueron retenidos en la comunidad Morelos, exigiendo la presencia del alcalde Urbano Álvaro Arcos, afirmando no querer nada con el subsecretario de Gobierno de la región XIV Tulijá – Tzeltal – Chol, Óscar Miguel Sánchez Alpuche, ya que éste tampoco ha sabido resolver el conflicto que se vive en aquella comunidad.
Al mismo tiempo, los tumbaltecos lanzaron un comunicado en donde exigen la intervención del gobierno estatal y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, ya que, aseguran, la autoridad municipal se encuentra violentando las garantías individuales del ejido.
Así mismo, hicieron un fuerte llamado al alcalde en donde, en el documento dice expresamente “Presidente Urbano Álvaro Arcos, desde la llegada de tu empleado forastero y/o sureño quien dice llamarse Guadalupe Guzmán López, exdirector de la Policía, persona que se ha dedicado a estafar a la población, según, aplicando sus propias leyes de derecho a su conveniencia, como lo que le pasó al ex edil y presidente del Partido Verde Ecologista de México de Tumbalá, así como el despido injustificado de cuatro policías y dos administrativos de Tesorería”.
Al llegar la noche una nueva versión se dio a conocer, en la cual, segundos antes de la trifulca entre policías y ejidatarios, el alcalde Urbano Álvaro Arcos fue agredido por la multitud enardecida, el cual fue golpeado y desnudado dejándolo solo en pantalón, ya que le fue arrancada la camisa, situación que originó la movilización de la fuerza pública; al cierre de edición una comitiva de Yajalón, posiblemente intercedería para la liberación de Baltasar Jiménez Torres, síndico de Tumbalá y Manuel Álvaro Arcos, segundo regidor.
La alcaldía fue tomada desde las 8:00 de la mañana; en el lugar, mantas donde exigen la destitución del alcalde.
El oficio que dejaron los tumbaltecos en donde piden la intervención de la CNDH.
