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Nada Personal, Solo Negocios

 Nada Personal, Solo Negocios

Bárbara Anderson

“Hola!, Mr. Slim”

Hace días, Carlos Slim lanzó en EU (con la fundación que lleva su nombre) el portal accesolatino.org.

Es un sitio que tiene consejos legales y de salud, pero básicamente está enfocado en la capacitación de esa enorme masa de hispanos del otro lado de la frontera. “La idea es apoyar a la población latina para que pueda aprender oficios (22 diferentes) pero fundamentalmente el idioma inglés”, explica Renato Flores Cartas, gerente de comunicación corporativa en Telmex.

El propio Slim la semana pasada en una conferencia en EU justificaba esta idea en el creciente número de hispanos en ese mercado, “donde ya suman 53 millones de personas”, ni más ni menos que 17 por ciento de la población total.

Este portal se suma a otras iniciativas de educación que ha motorizado la fundación del magnate de las telecomunicaciones, como www.academica.mx, que suma trabajos, cursos e investigaciones de más de 420 universidades de México y Latinoamérica; la alianza con Khan Academy para capacitación gratis en línea, y la apertura local de la plataforma de educación digital Coursera.

“Si bien, todos estos proyectos se operan desde el área de educación de Telmex, el ingeniero (Slim) personalmente está involucrado en cada una de estas ideas”, agrega Flores.

Los programas de capacitación que ha montado la fundación Carlos Slim tienen un detalle no menor: corren sencillamente en computadoras y teléfonos móviles.

No es ninguna novedad que en México y EU, el primero contacto de muchas personas con la tecnología sea antes en el celular que en una computadora. La enorme penetración de este servicio en todos los niveles ha democratizado el acceso a la información y también a la educación. Solo en el caso de los hispanos en el vecino del norte, el último informe de Nielsen reporta que 64 por ciento de los hispanos vive en hogares con suscripción a telefonía celular. Y consumen en promedio más servicios extras en sus móviles que la media estadunidense. De hecho, los latinos usan 17 por ciento más que los no hispanos el acceso a la web desde sus teléfonos inteligentes.

En este mercado, Carlos Slim también hace buenos negocios, ya que desde hace cuatro años es el operador líder en EU de telefonía prepaga con su empresa Tracfone superando a AT&T, Verizon, Sprint o T-Mobile.

Política Cero
Jairo Calixto Albarrán
“Los Chuchos” también son mis amigos

Ya  no se sabe qué es peor, ese universo monstruoso de la onda viral, el Gangham Style (frenesí pipirisnais del Pare de sufrir) el Harlem Shake (homenaje al No mamy blue) o el Ice Bucket Challenge, compendio de ominoso de lo que hace la mano hace la tras donde pasamos de la filantropía al oportunismo político en sus versiones más obvias como el góber chiapaneco.

Pero peor que todo eso es el nuevo azote viral, además de que el senador Barbosa afirme que “Los Chuchos son mis amigos” para luego ratificar su apoyo al ingeniero Cárdenas, está la consultitis aguda.

La consulta popular, algo que los grandes salvadores de la patria despreciaban olímpicamente, mientras la señalaban como un renglón torcido de democracia con el único objetivo de desprestigiar la chulada de reforma energética aprobada por una mayoría de papalords de la feligresía del fracking y de los Chicago boys descalzos de los últimos días. Pasado el Pancho por México (y es que ese pacto no fue con Dios) finiquitado el despacho contable dance de las reformas, y ya en la lógica de cada quien para su santo y la sobrevivencia del más apto (y el que se haga menos pato) lo de hoy, pues, son las consultas.

Tanto así que los que menos suelen consultar, los del PRIcámbrico temprano se han hecho adictos. Y ahora, para no ser menos que Morena y el PRD, que ya tenían muy platicada su consulta contra la privatización petrolera (la misma que el licenciado Peña dice que ni la ve ni la oye) y luego de escuchar que en el PAN quieren armar la suya sobre el salario mínimo (parece que mientras le pagaban lo del tiempo extra a las amigas de Montana, a los panistas se les despertó la idea de privatizar el salario mínimo, esa leyenda urbana) a los choznos de don Plutarco se les ocurre consultarle a la ciudadanía sobre la idea de desaparecer diputados y senadores plurinominales como si fueran levantados en Valle de Bravo.
Lo malo es que si se cargan a los pluris incluyéndolos en la lista de las 22 mil personas “no localizadas en el país” según la PGR (¿no les dan una gran tranquilidad estos datos?) sobre todo ahora que se sienten preponderantes y van por las mayorías con aplanadora incluida, los priistas son capaces de pedir rescate.

Como quiera que sea, ojalá que los próximos políticos que hagan esto del Ice Bucket Challenge, utilicen las aguas del río Sonora para que estas cosas tengan certeza jurídica.

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